Sábado de Pasión en Murcia: Fe y Caridad

abril 13, 2014

Sábado de Pasión en Murcia: Fe y Caridad

Semana Santa de Murcia
Capítulo II: Caridad y Fe para Murcia

La tarde de ayer se presentó mucho mejor que la del Viernes de Dolores. Con un cielo azul y un sol "de justicia" los hermanos de la Cofradía de la Fe hacían su salida a las calles de Murcia desde la Parroquia de San Francisco de Asís. Por primera vez en su historia la nueva talla de Santa María de los Ángeles desfiló por el callejero murciano siendo bien recibida por el público asistente. Emotivo momento la salida del Titular de los capuchinos cuando sonaba el Himno Nacional mientras se abría paso mirando al cielo. La Virgen de los ojos azules era portada en Alfonso X, a la altura del Museo Arqueológico con una dotación de estantes de la Caridad que entre palmas y vivas la despidieron en plena plaza de Santo Domingo. De igual modo, una dotación del trono de Ntra. Sra. de las Angustias (Servitas) acompañó el trono durante toda la procesión y al igual que la Caridad cargó el trono de la Madre de la Fe. Y entre tambores sordos e incienso hizo su aparición en las calles de Murcia el Nazareno de la Merced. Como ya es tradición, un año más la Hospitalaria Asociación de la Salud organizó el encuentro entre el Señor, la Virgen del Primer Dolor (que fue trasladada por la mañana desde San Miguel hasta San Juan de Dios) y San Juan Evangelista. Un acto al que cada vez acude más gente dejando la plaza de Belluga llena por cualquier rincón. Pasadas las 20:30h finalizaba el encuentro tras unas palabras del Obispo de Cartagena, dejando paso a la Cofradía de la Caridad que llegaba por Frenería.

Con un repertorio musical muy selecto en las bandas de música y la murcianía que rebosa en cada elemento de la Cofradía, la Caridad llegó hasta la plaza del Cardenal Belluga con su cortejo corinto llenando de costumbrismo y fe toda Murcia. Unas gotas que no llegaron a ser lluvia se hicieron presentes al paso del Nazareno por Belluga pero que poco tardaron en parar. Los cinco misterios dolorosos caminando magistralmente levantaron aplausos entre el público por los giros tomados en las curvas despertando así momentos de emoción y sentimientos. Una recién restaurada, María Dolorosa, aparecía ante el primer templo de esta Diócesis con sus brazos abiertos al cielo mientras un puñal atraviesa su corazón. Corazón dolorido y perfumado por la nube de incienso que envolvía al Titular de la Caridad. Un solemnísimo paso que levantaba de sus asientos a los asistentes con la particular unción y respeto que desprende esta Hermandad del Stmo. Cristo de la Caridad

TRASLADO, VIRGEN DEL PRIMER DOLOR

Desde la Parroquia de San Miguel hasta San Juan de Dios