Soledad de Murcia

junio 10, 2016

Soledad de Murcia

SOLEDAD CORONADA

Capítulo VII:
- Soledad de Murcia -

Cuando Dios creó el mundo tuvo que sonreir muy pícaro, feliz, orgulloso y satisfecho, de saber que nos daría todo lo necesario, pero acompañado de una Madre. Y cuando Dios creó por medio de unos devotos del Perdón, hace 120 años, su Cofradía con sede en San Antolín, sabía perfectamente lo que iba a suceder un siglo y veinte décadas después. Tenía en mano la lista paso a paso, hasta de quienes íbamos a vivirlo en primera persona. No ha ocurrido antes ni después, ha sido ahora porque así Dios lo ha querido.

Concedida la Coronación Canónica de la Soledad del Perdón, era la cuarta imagen de la Virgen, en la ciudad, que fuera coronada, y la primera por Monseñor Lorca Planes ante la Catedral de Murcia. Primero fue la Patrona, María Santísima en su devota y milagrosa imagen de la Fuensanta. Hace una década la Dolorosa de Jesús, la Dolorosa de Salzillo... siendo la penúltima de las cuatro la Virgen del Carmen del Barrio. Y entre todas ellas hay un común denominador y que desde el 22 de Mayo, dotan a la Soledad de San Antolín de la misma suerte.

Coronada la Patrona la Virgen de la Fuensanta, no le hace falta más tarjeta de presentación que decir su nombre, cuando hablamos de la Dolorosa de Jesús, hablamos de la de Salzillo, pero siendo sinceros, solamente hablar de "la Dolorosa" sin más complementos ni apellidos, sabemos de quien hablamos, al igual que con la Virgen del Carmen. Y es que si Murcia tiene una Virgen por Patrona es la Fuensanta, si tiene una Dolorosa... es la de Salzillo (de Jesús), si tiene una Virgen del Carmen... es la del Barrio.. "la Virgen del Carmen de Murcia", por tanto.. desde ese día y hasta el resto de la eternidad, si Murcia tiene una Soledad... es la del Perdón, por eso aunque Tú ya eras Coronada como Reina de todo lo creado, desde ahora eres la Soledad de Murcia, la que todos recordarán, la que todos señalarán, se santiguaran, ante la que todos rezaran sabiendo lo que aguarda tu cuerpo de madera celestial.

Pasadas las 9 de la mañana la Virgen de la Soledad comenzaba a caminar a Belluga vestida con las magníficas ropas restauradas para la ocasión, aunque la saya la estrenara hace algunos años. Un impaciente sol salía en su búsqueda y no quiso dejarla sola hasta que volvió a San Antolín. Incluso diría que no era el sol, era el brillo del cielo, era la alegría de Dios y los ángeles, de los Magentas del cielo, que festejaban que su Virgen iba a ser coronada.

Escoltada por las 11 hermandades de la Cofradía, la Parroquia y todos sus devotos, a los sones de Caridad del Guadalquivir entraba la Soledad a la Plaza del Cardenal Belluga en donde una muchedumbre se dió cita para no perderse el acontecimiento, aunque fuera incómodo, en una sombra, pero sin abandonar la plaza y poder vivir la Coronación en primera persona.

Cuando nos acercamos a nuestra madre y le decimos "mamá te quiero" , ella se sonríe con el corazón y nos abraza, asiente, y nos dice eso de "yo también vida mía..." Ella ya lo sabe, pero le gusta que se lo digamos...

Cuando rezamos a Dios, cuando le pedimos por quienes lo necesitan, por nuestros miedos, por nuestras angustias, incluso cuando le damos las gracias... aunque Él ya lo sabe, le gusta que tengamos esa confianza y se lo hagamos saber.

Una mezcla de ambas situaciones se produjo el domingo 22 de Mayo de este 2016. Dios ya coronó a María como Reina de todo lo creado, nosotros así la aceptamos y queremos... pero nunca estará demás hacerlo presente en una corona, en un manto, materializarlo en una ofrenda en la que vayan prendidas todas nuestras oraciones y gracias recibidas.

Ella, desde ese día más que nunca, es la Reina de San Antolín, la Señora del Lunes Santo que cruzó su barrio para ser coronada en Belluga por su hijos del Perdón como Murcia de testigo materializado en su inigualable e imponente Catedral.

Una vez bendecida la corona, presentada por las Hermanas de la Casa Cuna de Sucina (Madrinas de la Coronación) a Monseñor Lorca Planes, fue este quien ciñó a la Soledad la hermosa corona, en la que lleva el escudo del Perdón, ratificando pues su reinado sobre los Magentas.

Palmas, cohetes y tracas, el Himno Nacional... compusieron la banda sonora de aquel indescriptíble momento en el que todos emocionados aplaudíamos tal belleza sin igual. Porque fue justo en ese preciso instante cuando desde lo alto se pudo advertir el canto que dice... "y en el cielo una voz repetía... más que Tú solo Dios, sólo Dios..."

A los sones de la marcha Triunfal, al igual que la Virgen del Carmen en 2008, abandonaba solemnemente la Plaza del Cardenal Belluga, la misma que lloró su ausencia el Lunes Santo, pero que en escasos días ya la ha disfrutado dos veces, despidiéndola Coronada por Murcia bajo lluvias de pétalos, entre nubes de incienso y pólvora, entre el tintineo de las lágrimas de su paso y el de sus cofrades emocionados... porque de la emoción, hasta San Pedro que recibió su visita en su casa, cayó al suelo de rodillas al verla de frente y lloró, lloró más que nunca pero de emoción al tener frente a él la Madre de Dios que acababa de ser coronada, regalando a la Cofradía de la Esperanza y su casa, la primera entrada a una iglesia recién terminada la ceremonia. El camino mermaba, desde el Pilar miles de pétalos de rosas cubrían la majestad de Ntra. Sra., y el camino se acabó. Ella nos ha llevado desde el primer día, y para siempre, en sus manos, en esas manicas que se abrazan, porque rezan.. pero piden por favor al cielo que no hayan más penurias, que no haya más maldad, que algún día sea posible la Paz, que el nombre de Dios se haga presente en todos sitios... son unas manos esperanzadas que rezan al cielo por nosotros, porque ese corazón, ese corazón que lleva en sus manos atravesados por siete puñales, no es suyo, es un pedacico de cada uno del nuestro y que Ella custodia en sus manos, y esos puñales, esos dolorosos puñales, son las penas que afliegen a María de nuestro mundo, de nuestra sociedad.. Por eso, suspira tranquila en San Antolín, sabiendo que la queremos y, esperanzada, confiando que entre todos nosotros hagamos del Perdón, de la Semana Santa de Murcia, de la ciudad, del mundo entero, un lugar mejor para vivir.

Tras el Himno Nacional, marcado el ritmo por el campanario sanantolinero, la bella imagen entraba a su casa ya por fin. Entraba despidiéndose de todos, pero adentro ya... tuvo que dar la vuelta, no aguantaba más, necesitaba mirar de frente a su Hijo, a su Hijo del Perdón "¿lo ves? mira lo que me han regalado..." Ella y Él, frente a frente, ese encuentro que un Lunes Santo no pudo ser porque el cielo lloró, pero que Dios quiso que fuera ese 22 de Mayo. Y ambos lloraron de emoción, ambos estaban felices de ver que Murcia es mariana, porque como dijo el Santo Juan Pablo II:

"¡España Tierra de María!"

Mi enhorabuena a todos los que han hecho posible este largo año de actividades, y de manera especial estos meses con la Virgen de la Soledad. A la camarería de la Virgen, la junta de Gobierno del Perdón, los estantes de Ntra. Sra., sin duda a la Parroquia en la persona de Don Rafael que emocionado agradecía el buen desarrollo de este día una vez concluído todo.

Pero con el permiso de todos ustedes doy las gracias publicamente a:

Maribel Balboteo, ella sabe porque...

Mamen Cascales, María Vázquez y MariCarmen Juárez, por su colaboración con las redes sociales de Sentir Cofrade. ¡Gracias chicas por vuestro trabajo!

Diego Avilés Fernández, por su impecable gestión, pero sobre todo por ese contagioso cariño a todo lo que es el Perdón...

Y a mi amiga Verónica Baños, por ese amor a la Soledad, porque en ella me ví reflejado de mis vivencias en el Carmen aquel 2008, y con ella he podido volver a emocionarme ante algo tan hermoso como esto.

¡Viva la Virgen de la Soledad!

¡Viva la Reina de San Antolín!

¡Viva la Señora del Lunes Santo!

¡Viva la Virgen Guapa!

¡Viva la Madre de Dios!

Francisco Nortes

Director de Sentir Cofrade

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